Gravísima lesión de Ronaldo en la rodilla. :(

"A los 23 años y cuando militaba en las filas del Inter de Milán, Ronaldo sufrió una nueva lesión en el primer partido que disputó tras su recuperación, contra la Lazio. Se acabó perdiendo los Juegos Olímpicos de 2000 y no volvió a jugar hasta 2001. Tras pasar dos horas con el delantero en el hospital Pitié-Salpetriere de París, el doctor francés Gérard Saillant confirmó que Ronaldo se había roto por completo los tendones de la rodilla derecha, la misma rodilla que ya había sido operada en noviembre a raíz de una lesión similar, pero que sólo le había provocado una rotura parcial de los tendones. Saillant decidió que Ronaldo debía someterse a otra operación, que tuvo lugar en París y duró dos horas.

El médico estableció un programa de descanso y recuperación mucho más extenso del indicado tras la primera intervención: siete u ocho meses, en comparación con los cinco meses que necesitó para recuperarse en 1999. Con este diagnóstico, quedó claro que el jugador brasileño iba a perder su oportunidad de participar en los Juegos Olímpicos de Sydney. En un comunicado oficial, el Inter declaró que Ronaldo se iba a perder el resto de la temporada. Antes de la operación, el Dr. Saillant, especialista en el tratamiento de los tendones, negó que la carrera de Ronaldo hubiese llegado a su fin. El programa de recuperación fue muy similar al estipulado para la primera operación y, tras permanecer hospitalizado durante una semana, Ronaldo emprendió el largo camino que le llevaría de vuelta a los terrenos de juego.

Tras sufrir la lesión en Roma, Ronaldo no llegó a su casa en Milán hasta las 4 de la madrugada. Besó a su hijo Ronald, que había nacido ocho días antes, y lo tuvo en brazos toda la noche. Pasó una buena noche, con su esposa Milene Domingues a su lado. Se levantó a las nueve y desayunó un panecillo y un zumo de frutas, que le preparó su madre. Cogió un vuelo a París junto con su fisioterapeuta, Nilton Petrone, y el médico del Inter, Piero Volpi. Llegó al hospital Pitié-Salpetriere a la 1:45 de la tarde, hora local.

A lo largo de este aciago día, Ronaldo recibió numerosas llamadas telefónicas de amigos, de compañeros del equipo (como Romario, Edmundo, Rivaldo, Antonio Carlos y Leonardo), del que por aquel entonces era el seleccionador de Brasil, Wanderley Luxemburgo, y de Zico, que le llamó desde Japón. Sedado a causa de los analgésicos suministrados, el delantero durmió hasta pocos momentos antes de la operación.

Comunicado médico del hospital Pitié Salpetriere:
“Durante la tarde del día 13 de abril, Ronaldo se sometió a una intervención a cargo del Dr. Gérard Saillant para tratar la rotura traumática y completa de los tendones de la rótula derecha”. Según este comunicado, “la operación se prolongó durante dos horas y todas las roturas quedaron reparadas. Se ha establecido un programa de rehabilitación con una duración de entre siete y ocho meses”.

El suplicio que estaba atravesando Ronaldo era muy parecido al sufrido cuatro meses antes. Inmediatamente después de la operación, se le aplicó hielo a la rótula y se le colocó una rodillera rígida, tal y como se hizo tras la intervención realizada en día 30 de noviembre de 1999.

A pesar de que la rotura afectó a los mismos tendones patelares lesionados con anterioridad, la razón que justifica las diferencias existentes entre los dos programas de recuperación hay que buscarla en la naturaleza de las lesiones. En 1999, los tendones sólo sufrieron una rotura parcial, mientras que en 2000 la rotura fue total. Durante la primera fase de la rehabilitación, el jugador empezó a realizar tres sesiones de fisioterapia al día, en las que la rodilla operada se sometía a movimientos pasivos. Al cabo de unos dos meses, comenzó a realizar algunos ejercicios físicos y a mover la rodilla y la rótula.

En el transcurso de la siguiente fase, Ronaldo empezó a estimular una mayor actividad muscular. Más tarde, volvió a entrenarse con el balón. Según el Dr. Saillant, que llevó a cabo la operación, las precauciones extremas que se tomaban en todas y cada una de las fases de recuperación eran imprescindibles para poder garantizar una recuperación completa de la rodilla; el retorno de Ronaldo a los terrenos de juegos sólo sería una realidad si se procedía de esta manera.

A diferencia del anterior programa de rehabilitación, que se vio interrumpido y perjudicado por numerosos “incidentes” que poco tenían que ver con el fútbol, esta vez Ronaldo se aisló por completo para poder centrarse plenamente en su recuperación. “No quiero precipitar mi retorno, quiero mejorar día a día,” declaró el jugador el día 27 de febrero de 2001, durante sus entrenamientos en solitario en Teresópolis (en el estado de Río de Janeiro). “Quiero trabajar en solitario, alejado de los demás jugadores. No quiero cometer la equivocación de acelerar mi recuperación. Sólo quiero una cosa, algo que incluso se ha convertido en una obsesión para mí: recuperarme”